Nueva derrota de un negro Salamanca ante un Zamora que se reencuentra con la victoria(2-0)

Llegaban al Ruta de la Plata dos equipos con necesidad de puntos y de victorias. Por una parte el Zamora venía de cosechar dos empates y dos derrotas en sus últimos cuatro partidos por lo que la necesidad de reencontrarse con la victoria era capital. Por otra parte, el Salamanca llegaba a Zamora en una auténtica crisis deportiva, colistas, sin juego, sin goles, sin ideas... y tres puntos en un campo tan difícil sería moralmente importantísimo.

Comenzaba el partido en Zamora con una igualdad que duraría pocos. Poco a poco el equipo local se iba haciendo con la manija del encuentro. De esta forma en el minuto 7 Valentín ya probó al portero charro que atajó sin problemas.

Por su parte el Salamanca intentaba minutos más tarde atacar mediante Luis Madrigal quien no podía rematar un balón que sacaba Villanueva.

En el 17 Sergio García enviaba un balón por encima de la meta visitante.

El conjunto blanquinegro se mostró bastante regular hasta el momento en que Juanan del Álamo, que militó hace tres temporadas en el Salamanca, remataba de cabeza un balón colgado desde el la esquina derecha de la portería visitante.

Cinco minutos más tarde el Zamora ponía tierra de por medio tras un latigazo desde zona de tres cuartos de Carlos Ramos que hundía un poquito más a un Salamanca incapaz de reaccionar.

Significativo fue que en el minuto 36 el capitán, Antonio Amaro volvía a los terrenos de juego tras un par de jornadas lesionado. Volvía para cambiar el esquema de un Rafa Dueñas que no daba con la clave de un Salamanca que jugaba nada. Amaro sustituyó a Falconis.

La primera parte concluía con un Salamanca a merced del Zamora, y un Zamora con ganas de hacer sangre y golear a su rival.

La segunda parte empezó como acabó la primera. Con un equipo, el local, atacando y un equipo, el visitante, defendiéndose como buenamente podía.

El Salamanca intentaba llegar a la portería local en el minuto 53 mediante un Puma incapaz de tirar a portería. Su tiro lo tapaba muy bien la defensa zamorana que enviaba el balón a saque de esquina. Llorente ponía entonces un balón que se marchaba muy alto.

Por su parte el Zamora, en la acción siguiente, tenía el tercer gol en las botas de Valentín Prieto quien no sabía definir un mano a mano con el portero tras un centro desde la banda diestra que vergonzosamente pasaba entre la zaga charra como si nada y acababa en las botas de un 9 que definió de aquella manera quedándose a las puertas del tercer gol.

En el 63, el Salamanca, tras una acción individual de Puma, sacaba una falta peligrosísima desde la frontal del área. La falta, botada por Fer Llorente, era una jugada ensayada que acababa en fuera de juego de Uxio, sin embargo, se trata de la jugada de más peligro del equipo visitante con diferencia.

En el 72, una nueva jugada de peligro del conjunto charro se daba después de un córner forzado por Candelas. El saque de esquina lo botaba amaro y casi encuentra un rematador contundente, sin embargo, lo sacaba rápidamente, primero el portero zamorano y más tarde la zaga rojiblanca.

En la jugada siguiente, era el Zamora quien llevaba peligro tras un córner que botaba Dani Hernández desde banda izquierda y que despejaba en falso el portero visitante y que casi acaba en el fondo de la red. Una vez más el Salamanca sacaba a relucir su debilidad defensiva y casi le cuesta el tercer gol en esa acción.

Finalizaba el partido, y así se confirmaba un nuevo fracaso del Salamanca CF, un equipo sin ideas, sin ganas, sin ilusión y sin proyecto que se hunde en la última posición y cuya única esperanza es que sigue teniendo a sus rivales más directos a pocos puntos. Aun así, el Salamanca necesita despertar y salir de un pozo del que lamentablemente no tiene mucha pinta de que vaya a salir. Su siguiente rival es Unionistas de Salamanca, el derbi capitalino, se enfrentan al equipo más en forma del grupo, un rival cargado de ilusión, energía y buenas sensaciones. Prueba de fuego ante un rival que históricamente se le ha dado muy bien ya que nunca han perdido, sin embargo, al ritmo que van, este pretende ser el año.

Vicente Ladislao Sánchez