El toque de queda se adelanta a las 8 de la tarde

Francisco Igea, vicepresidente de la Junta de Castilla y León anunciaba esta mañana, viernes 15 de enero, las nuevas restricciones establecidas en la provincia como consecuencia del aumento de casos por COVID-19.

Las nuevas medidas se han tomado después de la reunión entre representantes de la Junta de Castilla y León y los alcaldes de los municipios mayores de 20.000 habitantes así como los presidentes de las diputaciones provinciales.

A partir de este sábado, 16 de enero a las 20:00 horas:

1. Se establece el toque de queda a las 20:00 horas




2. Perimetración de todas las provincias de Castilla y León, salvo en causas justificadas.




3. Se limitan las reuniones en los domicilios hasta un máximo de 4 personas. Además se recomienda no juntarse con personas no convivientes.




4. Se reducen los aforos en todos los lugares de culto a un tercio, con un máximo de 25 personas.

Recordamos que Castilla y León ha estado reclamando al Gobierno adelantar el toque de queda antes de las 22 horas además de pedir poder aplicar el confinamiento domiciliario si fuera preciso. 

Asimismo, Igea afirmaba esta mañana que “Si estas medidas en quince días no han tenido efecto, el confinamiento total será inevitable”. Añadía demás que ''el mensaje que buscamos transmitir a la población es qué no se muevan salvo para los imprescindible''. La situación obliga a ``ir al límite de lo que nos permite el estado de alarma''.

Finalmente, las medidas se endurecen y Castilla y León manteniendo el nivel de alerta 4 por coronavirus. Se estima que la incidencia superará los 1000 casos la próxima semana. Estas medidas tendrán como duración el propio estado de alarma, sin perjuicio de que las mismas puedan ser moduladas, flexibilizadas o suspendidas por el presidente de la Junta de Castilla y León en virtud de la evolución de los indicadores sanitarios, epidemiológicos, sociales, económicos y de movilidad.

Sonia Sánchez