El suicidio se posiciona como la primera causa de muerte dentro de los jóvenes españoles

La tasa de suicidios ha ido creciendo a nivel mundial de manera constante durante los últimos años. Para principios del presente año el Instituto Nacional de Estadísticas señalaba que en 2019 un total de 3871 personas se había quitado la vida dentro del territorio español. Sin embargo, expertos en el área de la salud especifican que en la actualidad la estadística podría ser mucho más grave. La pandemia, el confinamiento, el desempleo y la crisis económica ha deteriorado de manera grave la salud mental de la población.

Durante los primeros meses del presente año el Instituto Nacional de Estadística publicó unos datos bastante preocupantes. La tasa de suicidios en el país para 2019 había aumentado un 3,7% en relación con el año anterior. El rango de mayor “riesgo” sería entre los 30 y 39 años y los más afectados sería los hombres. El suicido se colocaría, así, como la principal causa de muerte en los más jóvenes. Por encima incluso de los accidentes de tránsito.

Las estadísticas apuntan un dato escalofriante: Cada día 10 españoles optan por quitarse la vida. A pesar de ello, España seguiría estando por debajo de la tasa de suicidios a nivel mundial. Dentro de Europa la tasa de suicidios es de 11.93 por cada 100.000 habitantes. Mientras que en el mundo se calcula que, bajo el mismo estándar de medición, 9,41 personas llevaban a cabo estas conductas. En este sentido, las autoridades sanitarias europeas ya clasifican esta conducta como el mayor problema de salud pública de la región.

Los expertos advierten que por cada caso de suicidio que sale a la luz hay muchos más que permanecen en las sombras. Una estimación destaca que por cada persona que logra llevar a cabo un suicidio existen otras 20 que lo intentaran, pero fracasaran. Los motivos que llevan a las personas a tomar esta decisión son complejos. Sin embargo, profesionales del área de la psiquiatría destacan que con la asistencia medica correspondiente y una buena promoción de campañas de prevención se podría evitar muchas de estas muertes. En la mayoría de los casos de suicidios existe un problema de salud mental subyacente que nunca fue atendido.

En lo referente, la actual situación de tensión constante producto del COVID-19 podría resultar un agravante. Sin embargo, no sería la culpable de este aumento de casos. La estadísticas publicadas por la INE se realizaron antes del inicio de la pandemia. El 2020 todavía no tiene contabilizadas las victimas de esta conducta. Al igual que, la complicada situación que se vivió durante el principio de la epidemia podría ocasionar que los datos no sean del todo certeros.

En este sentido, psicólogos y psiquiatras destacan lo aterradora que podría ser la realidad de los suicidios durante estos dos últimos años. Por ello, instan a las autoridades a no perder más tiempo y tomar medidas. Mayor inversión en salud mental, líneas de apoyo gratuitas para los ciudadanos, difusión y prevención sería algunas de las demandas de los médicos frente a la situación.