Suiza demostró su superioridad desde el inicio del encuentro, dominando tanto en posesión como en creación de oportunidades. Hungría mostró destellos de calidad, especialmente tras el gol de Varga, pero no pudo mantener la intensidad necesaria para igualar el marcador. La experiencia y solidez del conjunto suizo, liderado por un brillante Aebischer, fueron determinantes para asegurar los tres puntos. 

Hungría deberá mejorar su rendimiento para enfrentar sus próximos partidos, mientras que Suiza, con esta victoria, refuerza su candidatura para avanzar a la siguiente fase del torneo.

Ficha técnica 

Hungría: Gulácsi; Lang (Bolla, min. 46), Orban, Attila Szalai (Márton Dárdai, min. 79); Fiola, Nagy (Kleinheisler, min. 67), Schafer, Miloš Kerkez (Ádám, min. 79); Ronald Sallai, Szoboszlai; Varga

Suiza: Yann Sommer; Fabian Schär, Akanji, Ricardo Rodríguez; Widmer (Stergiou, min. 68), Granit Xhaka, Remo Freuler (Fabian Rieder, min. 86), Dan Ndoye (Vicent Sierro, min. 86); Aebischer, Rubén Vargas (Embolo, min. 74); Duah (Zeki Amdouni, min. 68)

Árbitro: Vincic (Eslovenia) Amonestó a los locales Attila Szalai y Bolla y a los visitantes Widmer y  Remo Freuler. 

Árbitro VAR: Kajtazovic (Eslovenia)

Gol: Duah, min. 12 (0-1); Aebischer, min. 45 (0-2); Varga, min. 66 (1-2); Embolo, min. 93 (1-3)

Estadio: Cologne Stadium

Crónica 

El partido comenzó puntualmente a las 15:00 horas con Hungría poniendo el balón en juego. Desde los primeros minutos, Suiza mostró una clara intención ofensiva, mientras Hungría se resguardaba en un bloque medio. A los 5 minutos, Widmer recibió la primera amarilla del partido por una entrada por detrás, lo que marcó el tono físico del encuentro.

Suiza tomó rápidamente la iniciativa y a los 13 minutos, Duah aprovechó un pase filtrado de Aebischer para abrir el marcador. El gol, inicialmente anulado por fuera de juego, fue validado tras revisión, dejando a Hungría en desventaja. Suiza continuó presionando, y Vargas tuvo una clara oportunidad para ampliar la ventaja en el minuto 20, pero su remate fue detenido por Gulacsi.

El dominio suizo se concretó nuevamente al filo del descanso. Aebischer, con un potente disparo desde fuera del área, anotó el 0-2, culminando una primera mitad en la que Hungría apenas pudo inquietar la portería defendida por Sommer.

La segunda mitad comenzó con un cambio en las filas húngaras: Bolla ingresó por Lang, buscando darle mayor profundidad al equipo. Hungría mostró una actitud más proactiva, pero las oportunidades seguían siendo escasas. Suiza, por su parte, mantenía el control del partido y seguía generando peligro.

A los 66 minutos, Hungría encontró su recompensa. Un preciso centro de Szoboszlai fue cabeceado en plancha por Varga, recortando distancias y poniendo el 1-2 en el marcador. Este gol revitalizó a los húngaros, quienes comenzaron a presionar más arriba y a crear oportunidades más claras.

Sin embargo, los esfuerzos de Hungría no fueron suficientes. Suiza realizó varios cambios estratégicos que les permitieron mantener la ventaja y gestionar el ritmo del partido. En el tiempo añadido, Embolo aprovechó un error defensivo para marcar el tercer gol suizo con una elegante vaselina, asegurando así la victoria con un definitivo 1-3.