El Atlético de Madrid ha finalizado la investigación relacionada con los altercados ocurridos en el derbi ante el Real Madrid, tomando la decisión de expulsar de manera permanente a nueve socios identificados como responsables.
El proceso de identificación, llevado a cabo por el departamento de Seguridad del club en colaboración con la Policía, incluyó la revisión exhaustiva de materiales audiovisuales. Como resultado, se abrieron expedientes que concluyeron con la expulsión definitiva de los socios implicados por conductas consideradas muy graves según la normativa interna del club.
Inicialmente, el Comité de Competición impuso la clausura de la grada baja del Fondo Sur por tres partidos, sanción que tras un recurso del club, se redujo a un partido, cumplido el pasado 20 de octubre contra el Leganés. Además, la multa fue ajustada a 3.000 euros. La Comisión Antiviolencia también propuso una sanción de cierre total del estadio por dos semanas y una multa de 65.000 euros.
Por otro lado, la UEFA sancionó al club con la prohibición de vender entradas para un partido de la Liga de Campeones y una multa de 30.000 euros, tras incidentes con comportamientos racistas por parte de un pequeño grupo de aficionados en el Estadio Da Luz de Lisboa.
Durante la investigación, el Atlético implementó medidas como la prohibición del uso de elementos que oculten el rostro en el estadio y suspendió temporalmente la venta de entradas a domicilio para algunos partidos, afectando a los socios de la grada de animación. Concluida la investigación y expulsados los socios responsables, el club ha reanudado la venta de entradas para partidos fuera de casa, comenzando con el próximo desplazamiento a Valladolid.
Las solicitudes de entradas seguirán las condiciones habituales: nominativas, intransferibles y con prioridad de asignación según la antigüedad de socio.
El Atlético de Madrid reitera su condena contra cualquier acto de violencia, reafirmando su compromiso de mantener el fútbol como un espacio de respeto y convivencia.
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